La APB ha recogido en el último año 185 m³ de residuos en el puerto de Palma
26/10/2017La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) ha recogido en el último año 185 metros cúbicos de residuos en la Zona I de las aguas del puerto de Palma, mientras que en el mismo periodo recogió 298 metros cúbicos. Estos datos ponen de manifiesto que los residuos retirados del mar entre julio de 2016 y el mismo mes de 2017 han sido un 38% menos que los recogidos en el mismo período de 2015 y 2016. En ambos casos los materiales más comunes extraídos del mar han sido plásticos y maderas (108 m³ de plásticos y 47 m³ de maderas en 2017 y 165 m³ de plásticos y 72 m³ de maderas en 2016). En cuanto a los meses de mayor volumen de residuos contabilizados, así como en 2016 el mes que registró una cifra más elevada fue el mes de agosto (33,20 m³) en 2017 ha sido junio (31,30 m³). Las actuaciones de limpieza de la zona I del puerto de Palma contemplan, además de la recogida diaria de residuos y materiales sólidos y flotantes, el tratamiento de los residuos retirados y su clasificación en envases y plásticos, residuos peligrosos, papel y cartón, vidrio, residuos orgánicos, maderas y voluminosos, hidrocarburos y otros. La APB dispone de un servicio por el cual una embarcación con un dispositivo de redes incorporado a su proa lleva a cabo las labores de limpieza, recogiendo de manera óptima los materiales flotantes. Realiza unas 130 salidas al año (todos los días laborables) y en cada una de ellas desarrolla entre 8 y 10 horas de trabajo. Además, en caso de emergencia, la embarcación realiza servicios extra de vigilancia y asistencia. Agentes externos La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) tiene entre sus prioridades el mantenimiento en buen estado de las aguas de los puertos que gestiona. Actualmente el Centro Balear de Biología Aplicada (CBBA) es el responsable del seguimiento y control de la calidad de las aguas de los 5 puertos de interés general de las Islas Baleares. Mediante esta iniciativa se da respuesta al cumplimiento de la Directiva 2000/60/CE de la Unión Europea que obliga los estados miembros a hacer el seguimiento del estado de las aguas en cada demarcación hidrográfica. Estudios previos indican que la calidad de las aguas de los puertos que gestiona la APB son óptimos y cumplen las directivas europeas, como también determinan que la gran mayoría de los agentes contaminantes provienen de la suciedad de las calles de las ciudades, arrastrada por las lluvias hacia torrentes generando el barro conocido como barro anóxico, que se hunde y acaba depositándose en el fondo de los puertos. El objetivo clave de esta directiva es la protección de las aguas superficiales, en los estuarios, las costas y las aguas subterráneas en todo el territorio de la Unión Europea para promover un consumo sostenible del recurso y garantizar una mejora de los ecosistemas acuáticos. Los puertos españoles, conjuntamente con el resto de puertos de la UE, han venido trabajando desde principios de la década de los 90 en la introducción de las exigencias ambientales en la gestión portuaria. El resultado es la ROM 5.1 de Calidad de las aguas litorales en Áreas Portuarias, una normativa que la APB se aplica y que pone en manos del CBBA. De esta manera los puertos pueden contribuir a la sostenibilidad del transporte reduciendo los impactos ambientales portuarios, llevando a cabo una mejor labor de prevención, control y gestión de los riesgos ambientales y, en definitiva, una más fácil adaptación de los puertos a las exigencias de la legislación ambiental.